Mis historias

21 febrero, 2013

El tiempo se agota.

"Y mi vida con él. Me han dicho que en la vida no hay mayor principio que el nacimiento, y peor final que la propia muerte. Y es demasiado cierto. No sabemos cuánto tiempo nos regala la vida cuando nacemos, no sabemos cuando el reloj dejará de funcionar dentro de nosotros. Pero yo sí sé que no me queda mucho, que no me falta mucho tiempo para que llegue mi momento. Llevo la cuenta atrás, lo noto. Lo presiento.
Día a día, encerrada en mi habitación, arropada en mi cama, cuento mis latidos, uno a uno, hasta quedarme dormida, los cuento y cada día son menos. Sé que se me está agotando mi tiempo. Que una sombra se apodera de mí, lentamente.
Sé que mañana cuando me quede dormida no volveré a abrir los ojos, no volveré a sonreírle a la vida. No volveré a ver el sol, a sentir la vida. No seré persona. Habré muerto, transportándome a otro mundo, o quizás consumiéndome dentro. Se termina, mi vida, mi felicidad. Y yo no puedo hacer nada."

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